miércoles, 21 de julio de 2010

Hombres, animales, ¿lo mismo?

Tal parece que Dickens dijo que "el hombre es un animal de costumbres" y un grupo de científicos norteamericanos liderados por Albert-László Barbási lo comprobó con un éxito rotundo.

Sin embargo, cito estos personajes para parecer inteligente, letrado y leído, algo que muchos tratan de esconder, y con todo éxito.

En nuestra fauna nacional, encontramos diferentes tipos de "costumbres animales" que son fáciles de reproducir: gente que no hace fila, no sólo en cines o baños, sino en sitios tan críticos como un semáforo; gente que cree que están en el bosque y utilizan pequeños espacios de la vía pública para saciar sus instintos (aquí hay dos palabras que pudieran cambiarse "vía púbica" tal vez e "intestinos"); otras "personas" que creen que tienen derechos pero no deberes, y ahora que lo pienso, seguramente ellos creen que están actuando bien, por aquello del "instinto".

Así hay miles y miles de ejemplos que nos muestran cuan "evolucionados" estamos. Seguramente, en la antigua Roma había más orden en las orgías que en la calle 100 con carrera 15 de Bogotá, o en la antigua carrera 21 de Manizales, llena de busetas y muchas otras cosas.

Pero la raíz de todo esto es si somos lo mismo: hombres y animales. Los hombres somos, siendo fieles a nuestro ADN, gran parte de animales. Pero eso no significa que actuemos como tales, ya que tenemos muchas cosas que nos diferencian (pulgares oponibles, capacidad de caminar erguidos y la más importante, capacidad de raciocinio, discernimiento y diferenciación entre lo bueno y lo malo).

Es tan fácil creerse humano y serlo, aunque muchos de nuestros congéneres todavía no lo hayan asimilado. Tal vez esa es nuestra función en la vida: Educar.

Entonces, spread the word to the world!

Saludos,

Vlogordo

4 comentarios:

  1. Yo creo completamente lo opuesto... nos creemos inteligentes, pero no hay tal... hasta tú, que partes de una posición tan "evolucionada" al no reconocerlo (no reconocer que no somos tan inteligentes) estás dando muestras de no ser tan inteligente (al no notarlo), como por ejemplo, yo! ; ) Que soy tan inteligente como la multitud, es decir, pocón, pocón... jajajajajajaj... perdón, esto quedó fastidioso!!! :D

    Pero es por eso que no hacemos la fila en el semáforo...

    Me gusta la reflexión de Mafalda sobre la frase con la que inicias el post: ¿y no será que de costumbres, el hombre es un animal?"

    :D

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  2. Tienes toda la razón, y parte de la genialidad es reconocer los errores, por lo tanto, reconozco que me equivoqué, lo que demuestra lo inteligentes que podemos ser ;-)

    También vi la reflexión de Mafalda y esperaba que tú también la vieras.

    Un abrazo...

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  3. Y me encontré esta cita ahora, y pensé en tu post, aquí te la dejo:

    El hombre es en el fondo un animal terrible y cruel. Lo conocemos como ha sido domesticado y educado por lo que conocemos como civilización.
    Arthur Schopenhauer

    Picos Gordo!!!!

    Ahhh, reconozco tu grandeza!!!

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  4. Pero sabes qué? Yo diría más que Shopenhauer (JA!), yo diría que el hombre, todo eso que él dice, no lo es en el fondo... sino a flor de piel!

    Picos ahora sí!

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